Qué Comprar en Praga

Las joyas hechas en granate checo, enmarcadas en oro o plata son un regalo fantástico para cualquier persona, ya que son sinónimo de sofisticación y elegancia.

La piedra es famosa por su color intenso y brillante y se la ha llamado la "sangre de la tierra".

A ella se le atribuyen poderes especiales para el rejuvenecimiento y el cuidado de la salud, además se cree que quien porta una piedra de granate tendrá mayor claridad de pensamiento, fuerza, coraje y valentía.

Su increíble belleza de tonalidades desde el rojo oscuro hasta el burdeos, la hacen versátil para varios estilos de joyas, por eso la joyería checa de granate es tan variada.

Si compras una joya de granate checo solicita el certificado de autenticidad para evitar que te estén vendiendo falsificaciones.

Otro punto a tener en cuenta es que el tamaño te indicará el verdadero origen de esta piedra. El granate checo es pequeño, sus piezas de no exceden los 3 milímetros de diámetro, si su medida es mayor, probablemente tengas a la vista una piedra de origen asiático.

El cristal de Bohemia se produce en el país desde hace más de nueve siglos, es un producto tradicional checo, un símbolo nacional de calidad y estilo propio.

En el siglo XIII aparecieron las primeras fábricas de vidrio en Bohemia y para el siglo XVII el producto tomó una posición fuerte en el mercado europeo.

Los artesanos checos crearon un cristal especial cuya composición única permitió un hermoso corte y grabado en vidrio, creando con esta materia prima tan singular, artículos sofisticados y exclusivos.

Los artículos de cristal y vidrio de Bohemia son regalos sofisticados y tradicionales que puedes comprar en las exclusivas tiendas especializadas de Praga.

En el centro de la ciudad encuentras las tiendas de cristal checo de la marca Cristal de Bohemia.

También puedes comprar en las tiendas Moser situadas en la zona vieja de la capital.

Si compras artículos de cristal pide un embalaje fuerte para un transporte seguro.

La cerveza en la República Checa es un producto local único y de excelente calidad.

Su fabricación en esta zona se remonta a la época de los celtas, hace miles de años.

Desde el siglo X comenzó a elaborarse en los monasterios y desde la Edad Media se manufactura en las ciudades, ya sea en casas particulares o en cervecerías.

El consumo masivo de cerveza se inició cuando se produjeron las grandes epidemias de enfermedades que se produjeron en Europa durante la Edad Media. Los habitantes de Praga comprendieron que el agua provocaba muchas de ellas, entonces reemplazaron su consumo por cerveza. Así surgieron las primeras cervecerías en la región de Bohemia.

La ventaja de esta bebida era que en el proceso de fermentación y cocción del lúpulo descontaminaba el líquido por lo que su consumo se tornó mucho más seguro que el del agua.

La cerveza checa tiene marcas mundialmente reconocidas por su elevada calidad como Pilsner Urquell, Velkopopovický Kozel, Staropramen, Gambrinus y Radegast.

En tu próxima visita a Praga te recomendamos que compres las variedades Pilsner Urquell rubia y Velkopopovický Kozel negra con un interesante sabor a chocolate y café.

La original y deliciosa cerveza artesanal se elabora actualmente en cervecerías checas, monasterios o casas particulares y la puedes degustar en los restaurantes. Pero no puedes llevar esa cerveza como recuerdo, porque su fecha de caducidad es sólo de un par de días.

Para comprar cerveza de regalo tienes que buscar los envases comerciales de las marcas tradicionales checas en los supermercados en su packaging de lata, para un transporte más seguro.

La bebida llamada Becherovka se fabrica en la zona de Karlovy Vary, el cual es un licor de bálsamo fuerte combinado con una infusión de hierbas y especias, además de agua curativa del lugar.

La fórmula precisa y sus ingredientes principales son secretos, la receta original se guarda en un banco suizo y solo es conocida por dos personas. Lo que sí se sabe es que su sabor se ha mantenido inalterable por más de 200 años.

Los expertos del lugar recomiendan beberlo frio a 5 o 6 grados. Es muy usada para abrir el apetito antes de la comida o para mejorar la digestión después de la cena.

La Becherovka puede ser añadida al té o al café. También se logra un sabor interesante si se combina con una rodaja de naranja espolvoreada con canela.

Es una gran idea comprar Becherova para llevar de regalo a amigos y familiares, ya que puedes hacerlo fácilmente en las tiendas y supermercados de Praga.

Los cosméticos de cerveza son tendencia de moda en la ciudad de Praga.

A los checos les gusta tanto la cerveza que incluso están dispuestos a nadar en ella y han inventado los baños de cerveza que son muy populares. En las calles de la Ciudad Vieja encontrarás muchos salones de spa de cerveza, donde tomar esta relajante y original terapia.

También puedes comprar cosméticos a base de cerveza para tu SPA casero: espumas y sal para baños, champús y geles de ducha que también son una gran opción para llevar un regalo de Praga.

La famosa marca de cosméticos de la República Checa "Manufaktura" tiene tiendas en el centro histórico de Praga donde puedes comprar cremas para la cara, las manos y el cuerpo, bálsamos para el cabello, champús, jabones y geles de ducha, todos productos fabricados a base de lúpulo.

También hay locales donde puedes adquirir cosméticos a base de cerveza de elaboración artesanal o hecha a mano.

El queso tradicional checo se llama Hermelín, tiene textura suave, agradable y con moho blanco y denso en la superficie, se fabrica con leche de vaca y por su excelencia ha sido considerado durante mucho tiempo como un manjar real.

El queso checo Hermelín se sirve como un plato único, puede prepararse frito, horneado o marinado y es una gran combinación para el vino blanco y la cerveza.

En las tiendas y supermercados puedes comprar Hermelín marinado y sazonado con diferentes especias a un precio muy accesible.

Las obleas de balneario son una especie de barquillo o masa crujiente y ligera que son muy tradicionales en la República Checa.

Uno de los principales ingredientes de estas obleas balnearias, son las aguas curativas de las zonas termales checas.

En los escaparates de las tiendas puedes comprar estos barquillos de varios balnearios: Lasenske Oplatky, Marianske Oplatky, pero los más famosos son los de la marca KARLOVARSKÉ OPLATKY.

Las deliciosas obleas de balneario KARLOVARSKÉ OPLATKY se inventaron en el siglo XVIII en Karlovy Vary.

Su fundador Karl Bayer comenzó allí con una fábrica que era un negocio familiar y la panadera e inspiradora ideológica fue Barbara Bayerova.

Karlovy Vary estaba de moda en ese tiempo y era un balneario frecuentado por famosos huéspedes que eligieron a las obleas de balneario KARLOVARSKÉ OPLATKY como sus favoritas.

Con el tiempo el prestigio de las obleas traspasó fronteras, convirtiéndose en un manjar popular en muchos países europeos, incluso llegaron a las cortes imperiales de Austria y Alemania.

Las obleas de balneario de la marca KARLOVARSKÉ OPLATKY son delgadas placas redondas con un sello distintivo, se elaboran en diferentes tamaños y tradicionalmente son redondas o se cortan en porciones triangulares.

Las obleas tienen dos capas de masa y una capa del relleno de diferentes sabores como chocolate, nuez, vainilla, almendra, canela.

Las obleas con forma de triángulos son como porciones de tarta. ¡Un tradicional y delicioso recuerdo de Praga!

Si tienes en la familia o entre tus amigos alguna persona con importa artística, tienes la opción de comprar artículos de papelería y dibujo de calidad de la prestigiosa marca KOH-I-NOOR Hardmuch, cuya primera fábrica fue fundada en 1790.

Un regalo original de Praga que encuentras en numerosas tiendas y centros comerciales y que puedes comprar tanto para amigos o familiares, ya sean niños o adultos que gustan del arte y el dibujo.

El topo Krtek es un personaje gracioso de dibujos animados muy popular en la República Checa que se convirtió en una marca distintiva para el país.

Los artículos con la figura de Krtek son un divertido recuerdo de Praga para llevar de regalo. Puedes comprar en las tiendas muchos juguetes, camisetas, artículos de librería, rompecabezas, bolsas, maletines, con el característico personaje checo.